Como ya sabéis, me encuentro en plena faena de decorar mi casa nueva. Así que os voy a dar algunos tips que estoy aprendiendo y que puede que os sean de utilidad. Yo estoy yendo con calma, que será uno de los consejos que veréis a continuación.
He de confesar que, aunque yo acabo de mudarme y no tengo intención de volver a hacerlo pronto, me encanta cotillear el sector y ver las novedades. Y no solo en Granada, muchas veces me meto a cotillear webs de inmobiliarias en Barcelona, Madrid, u otras grandes ciudades, que es donde se ven casas más impresionantes. Cuando están bien decoradas, ¡se cogen muchísimas ideas!
Los consejos que daré hoy son muy generales, podrían aplicarse tanto a casas de alquiler como a casas en propiedad. Aunque en el caso de las casas de alquiler ya sabéis que existen una serie de limitaciones (lo que haya ya en la casa, si podemos hacer agujeros o pintar las paredes, la flexibilidad del casero, etc.) que afectarán a estos consejos.
Mudarse es un proceso agotador, pero que abre la puerta a todo un mundo de posibilidades para decorar y crear un nuevo hogar. Pero lo más normal es que nos terminemos volviendo un poco locas. Con estos tips, podrás conseguir una decoración a tu gusto y sin que el bolsillo se resienta.
También influirá mucho la casa a la que nos mudemos. No es lo mismo una casa nueva que una antigua. Una totalmente aséptica a una con personalidad. Una que necesita reforma a otra que está perfecta. Una que tiene vistas al mar que una que está en el campo. Por eso, cuando cotilleo en Internet, ya sean un piso antiguo en el centro o una casa de obra nueva en Barcelona, siempre veo muchas diferencias y posibilidades, ¡y eso me encanta!.
Es muy normal que, desde que vemos las fotos en el portal inmobiliario, ya estemos pensando y planeando cómo vamos a decorar y qué vamos a colocar aquí y allá. Aunque obviamente esto nos permite hacernos a una idea del espacio, la luz y la disposición, no te precipites con las decisiones. Incluso después de varias visitas, es posible que luego el salón no sea tan grande como pensabas o ese rincón del dormitorio no sea tan luminoso.
Aunque, obviamente, puede ir inspirándote y tomando algunas decisiones, te aconsejo que no compres nada hasta que no estés ya en tu nuevo hogar. Una vez allí, tampoco te vuelvas loca el primer día haciendo una visita a Ikea y comprando todo tal cual lo viste en el catálogo. Tendrás, entonces, una casa sin personalidad.
«RRR». Recicla, reduce y reutiliza. Lo más probable es que tengas que comprar muebles y objetos de decoración. Pero no te vuelvas loca haciéndolo todo de golpe y lo primero que pilles, porque lo más normal es que, a los pocos meses, te des cuenta de que no te gusta. Es evidente que necesitas unos básicos para vivir (cama, sofás, mesa, sillas, estanterías…). Por eso, si puedes, reutiliza algunos que ya hubiera por la casa, que algún familiar tenga y no necesite, o compra muebles baratos de segunda mano. Aunque no sean los más bonitos del mundo.
Esto te permitirá poder vivir y empezar a hacer tu casa habitable, a la vez que planificas con calma la decoración. Cuando ya estés habitando en ella, y poco a poco, decidas el estilo y la decoración, podrás invertir, si quieres, en muebles más caros.
Durante los primeros meses es normal que haya cajas por medio, muebles fuera de su sitio y, por lo general, tu casa sea un caos. Es muy posible que eso te agobie, y la idea de que venga una visita y tengas todo manga por hombro te horrorice. Intenta echarle paciencia y pensar que, cuando acabes, tendrás una casa de 10 😉
No intentes decorar y arreglar toda la casa de golpe. A nadie le sobra el tiempo, y es posible que a decorar y organizar solo puedas dedicarle los fines de semana y algún rato libre. Te recomiendo que vayas por zonas. Así, focalizas y no mezclas ideas. Obviamente es imposible dedicarse 100% a una estancia sin pensar o planificar las demás, pero si vas poco a poco te aseguro que se avanza más.
A estas alturas, sabrás que la disposición de los muebles es muy importante. Y un punto a tener en cuenta a la hora de comprar. Quizás esa estantería te encanta, pero es tan grande que, si la pones en el salón, se quedaría muy agobiante.
Una buena idea es comprar rollo de papel y colocar en el suelo trozos que simulen los muebles. Así podrás ver la distribución del espacio, situarlos donde más te guste y ver qué tamaño real necesitas. Igual, a golpe de ojo, pensabas que el sofá quedaba ahí bien, pero luego te das cuenta de que no se puede pasar.
Otra idea, si tienes habilidad con el dibujo o los programas de diseño, es hacer croquis de cómo vas a ubicar los diferentes elementos. Quizás en tu cabeza queda muy bonito pero luego te das cuenta de que no es así.
Pinterest, los blogs y las revistas de decoración son una fuente inagotable de inspiración e ideas. Hacer recortes, crearte un tablón y guardar páginas en favoritos te permitirán darte cuenta de qué estilo de decoración es tu predilecto, e incluso hacia qué tonos se inclinan tus gustos.
Pero no te agobies al consultar estas fuentes. Las casas que inspiran son perfectas, son fruto de muchos años de trabajo y también de mucho dinero detrás. Tienen grandes piezas únicas, y no se han limitado a comprar los muebles en Ikea y la tienda del barrio. Por eso, no intentes imitar todo lo que ves en las revistas, llévalo a tu terreno: a tus gustos, tu bolsillo y tus posibilidades.
Dedica tiempo a patear las tiendas. Tanto en tu ciudad como online. Adoro Ikea, y la mayoría de muebles de mi salón son de allí, pero también me gusta buscar piezas únicas, diferentes y especiales. La mezcla y el equilibrio de distintos muebles serán los que consigan un espacio acogedor y con personalidad.
Además, si buscas y comparas podrás encontrar esa pieza perfecta que tienes en mente, y no conformarte con la primera que pillas. Por eso, tomártelo con calma y no decorar todo de golpe es muy importante. Debes dejar un margen para encontrar esas piezas perfectas.
Hay blogs que me encantan y me dan mucha envidia porque encuentran piezas de segunda mano maravillosas. Aquí en Granada, las tiendas dejan mucho que desear, y Wallapop es un desastre. Pero eso no me hace desilusionarme, tirar la toalla y decir «paso, ¡voy a comprarlo todo en la misma tienda!». Al revés, me motiva más para moverme y encontrar ese mueble que quiero. Si vives en una gran ciudad, enhorabuena, porque lo de encontrar auténticas joyas de segunda mano lo tendrás mucho más fácil 😉
Si no te sobra el tiempo ni las ideas, probablemente pasarás de hacer cosas por ti misma. Porque es más rápido comprar algo y salir del paso. Pero muchas veces, cuando no encuentras esa solución perfecta, lo mejor es hacerla tú. Lo podrás hacer a tu gusto y medida. Y, por supuesto, si no te ves capaz, siempre puedes pedir algo de ayuda 😉
Cuando nos mudamos y nos motivamos con la decoración, es normal que, cuando pisamos las tiendas, sobre todo las low cost, se nos vayan los ojos a los objetos de decoración y terminemos picando. Además, en cosas que no nos hacen falta: velas, cuencos, adornos… También es muy común que la gente te regale cosas. Y al final tu casa sea una suma de objetos que están en medio y que te sientes obligada a encajar en tu decoración.
Obviamente podrás comprar objetos de decoración, pero espérate a que tengas todo lo básico decidido, para ver qué espacio real tienes.
Si te agobia tener la casa desangelada y medio vacía, aporta pequeños detalles que den calidez, sean útiles, y que luego, en caso de que no encajen con la decoración final, puedan ser sustituibles fácilmente. Unas fundas de cojines hechas por ti, unas láminas que imprimes en casa, unos montones de libros en el suelo, o unas mantas en el sofá. No requieren mucha inversión y además no molestan.
Muchos de los consejos anteriores están destinados a ahorrar: No comprar muebles que luego no nos van a gustar, buscarlos de segunda mano, hacerlos nosotros, esperarnos a comprar solo lo necesario, patearnos las tiendas y comparar… Mudarse es caro, requiere tiempo y dinero, pero si te planificas tu bolsillo se resentirá menos. Si dedicas el dinero del que dispones a las cosas más necesarias, y dejas lo secundario para más adelante, tu bolsillo te lo agradecerá.
¡Y eso es todo!
¿Qué consejos y tips sigues cuando te mudas y tienes que decorar?
¿Eres de las que lo compra todo de golpe o le dedicas tiempo a encontrar esa pieza perfecta?
2 respuestas
Yo llevo casi 5 años en mi casa (espero que la definitiva, ahora que nos hemos casado con el banco…) y aún la estamos arreglando! En una casa nunca acabas.
Por otro lado, algo que no me gusta nada es que me regalen objetos de decoración o fotos (con su marco y todo), por qué? A ver, lo agradezco, pero es que no me gusta tener todo el piso lleno de fotos (y no sé decir que no)
En fin… Por cierto, felicidades Carmen!!! 7 años ya de blog!! Espero que cumplas muchísimos más 🙂
Hola Carmen! Oye una pregunta… yo también estoy en el momento de empezar a decorar una casa vacía, y se me van los ojos a los muebles «de madera» (quiero decir, no lacados de color), pero me dicen que vaya con cuidado porque no me combinarán con el suelo. El suelo es cerámico de esos que imitan el parqué, pero de un tono de madera bastante claro que incluso tira un poco a gris.
¿En serio te parece que es posible que no me guste mi decoración porque no combine con el suelo…? Es una casa tan blanca… que me apetecía darle calor de hogar con algo de madera.