diy: pompones

Este es uno de esos DIY poco útiles, porque estoy segura de que a estas alturas ya todo el mundo sabe hacer pompones con papel de seda. Pero lo publico más por enseñar el resultado que por otra cosa. De hecho, ya saqué una vez el paso a paso de los pompones, pero esas vez pensados en empaquetar regalos.

Bueno, pues esta vez lo hice pensando en decorar un rincón del taller que estaba un poco soso. Es justo encima del radiador, donde tengo pendiente aún colocar una tabla, pero aun así veía que faltaba algo. Así que se me encendió la bombilla.

Para hacer un pompón solo hace falta papel de seda y un hilo o cordel. Cuanto más papel de seda usemos más frondosos quedarán. Necesitaremos unas 15 hojas, o más, todas del mismo tamaño (esto es importante). Debéis aseguraros de que están todas correctamente cortadas (los paquetes de papel de seda suelen venir en pliegos muy grandes doblados en varias partes, así que tenemos que garantizar que los hemos separado).

Ponemos todas las hojas una encima de otra y empezamos a doblar en zigzag, procurando hacer todos los pliegues del mismo tamaño. Una vez terminado, hay que sujetar nuestro «acordeón» por el centro con un hilo o cuerda:

Si lo queremos para colgar, entonces tendremos que dejar el cordel para luego poder hacerlo. Si, por lo contrario, queremos usarlo para envolver o colocarlo en alguna superficie plana, entonces sí, podemos cortar.
Redondeamos las esquinas de nuestro acordeón para que luego nuestro pompón parezca más una flor:

Luego estiramos nuestro acordeón hacia ambos lados, de forma que quede como un lazo. Luego, iremos levantando pliego por pliego, con cuidado de no romperlo, que ya sabemos que el papel de seda es muy delicado:

Y ese es todo el proceso: levantar hojas. Tened en cuenta que, si lo queréis para colgar, deberéis levantar la mitad por un lado y la mitad por el otro, así quedará redondo. Parece pesado pero se hace en poco tiempo y es bastante fácil. Hasta pueden intentarlo los peques 😉

¡Y eso es todo! También podéis combinar dos colores en un solo pompón. En este, fui poniendo una hoja de amarillo, otra de verde menta, hasta que se gastó el papel de seda. Es también una buena opción para cuando no tenemos papel de seda suficiente para hacer uno solo.

¡Aquí mi resultado!
Los fijé al techo con un poco de washi tape (de los buenos, para que no se despegue), porque no conseguí clavar ni una chincheta. Aun así, pensad que los pompones pesan poco así que con eso debería de ser suficiente.

Como veis, podemos hacerlos de distintos tamaños, solo hay que jugar con el tamaño de los papeles de seda antes de empezar.

Y también podemos probar con papeles de seda estampados, como el mío de lunares. Por si os interesa, es de Ikea.

Los pompones están ahora muy de moda para decorar fiestas, aunque también quedan geniales en algunos rincones de la casa. Claro, no lo vas a poner en un salón sobrio… Pero para estancias más desenfadadas y coloridas, como mi taller, creo que van genial. Y ahora que viene la primavera… Todavía más.

¿Qué os parece el resultado?
¡A mí me ha convencido totalmente!